No te vayas de vacaciones sin dejar un ojo en tu casa. O más de uno...
¿Angustia por no saber qué ocurre en casa cuando estamos fuera? La domótica puede ayudar
Prepararse para las vacaciones no sólo es cuestión de reservar las estancias, los vuelos y hacer la maleta, también hay que dejar a punto todo el sistema de control de la casa. Dado que me encuentro actualmente en dicha tesitura, pensé: ¿qué recomendaría para empezar? Os dejo unos consejos sobre lo más básico en domótica: podréis iros de casa dejando un ojo en el domicilio.
Soy Iván Linares. Comenzamos.
¿Qué ocurre en casa cuando estamos fuera?
Como fan absoluto de cualquier cacharro tech, también me encanta la domótica, sobre todo por lo bien adaptada que está al smartphone. En mi caso, he centralizado la alarma, cámaras, termostatos, luces, aire acondicionado, caldera y calefacción en un marco de control que me permite seguir el estado de mi casa desde el móvil incluso durante las vacaciones. Esto atañe también al exterior, que el jardín no escapa de la domótica.
Vigilar que nadie entra en el hogar es básico: para eso están las cámaras conectadas (mucho cuidado con ponerlas fuera, que hay que cumplir con la legalidad) y todos los sensores de intrusión; como los de movimiento, apertura de ventanas y ruido. Controlar las luces es otro de los puntos básicos: creando programaciones semanales resulta posible simular que estamos en casa incluso durante las vacaciones (yo tengo creados distintos macros y, de vez en cuando, también activo las luces manualmente). Más allá de la seguridad, la domótica permite mantener la temperatura del interior de la casa, regar las plantas del jardín, recibir alertas cuando alguien llama al timbre (si dicho timbre dispone de cámara incluso es posible hablar con el transportista) y un sinfín de tareas más: su alcance es casi infinito. Eso sí, cuanto más alcance más presupuesto, que la domótica compleja no es barata.
Además de los accesorios domóticos, hay un punto donde quiero incidir: la conexión a Internet. Dado que todos los dispositivos de seguridad y control se conectan a Internet, necesitáis que el acceso inalámbrico de vuestra casa sea fiable. Si salís de vacaciones, es buena idea montar un router de respaldo con SIM; así como añadir algún tipo de SAI al propio router: debéis aseguraros de que nunca se pierde la conexión a Internet. Estar fuera de casa y no saber por qué no se encuentra accesible crea angustia, puedo dar fe.
Lo imprescindible para controlar la casa por dentro y por fuera
Como anticipaba, la domótica es un pozo sin fondo: podéis gastaros tanto como queráis. No obstante, mi recomendación es que, si queréis empezar, lo hagáis primero por las situaciones básicas:
Una cámara de interior. Recibir alertas de movimiento, y controlar que nada ocurre mientras estéis fuera, me parece imprescindible. Una opción económica y de gran calidad/precio es la cámara de Xiaomi: bien situada controlaréis una buena porción de vuestra casa. Por 31 euros no se puede pedir más, incluso ofrece rango de 360º. Una buena alternativa, que añade mayor vigilancia, es una Ring: desde 60 euros (fija). Con las cámaras os ahorráis los sensores de movimiento: ofrece notificaciones de presencia.
Iluminación. Las luces son otro elemento de la domótica que no sólo es imprescindible, también bastante barato. Mi sugerencia es que coloquéis una luz conectada en las estancias clave: comedor, dormitorios, pasillo y exteriores (en las áreas de paso y en el porche). Aquí tengo dos recomendaciones: la mejor es Phillips Hue, con packs de bombillas desde los 50 euros (funcionan sin el hub de Hue o con él); de las más económicas es Tapo, de TP-Link: no hace falta hub y tenéis packs de tres bombillas por 32 euros. Lo ideal es comprar las bombillas del mismo sistema: así usaréis sólo una app.
Enchufes inteligentes. Estos dispositivos son muy útiles porque permiten automatizar otros aparatos que, de otra manera, no podrían controlarse a distancia. Desde una lámpara tradicional a un ventilador o calefactor eléctrico, por ejemplo: las situaciones son muy amplias. Y hay precios para todos los bolsillos: en mi caso, tengo varios de Muvit y funcionan muy bien. 15 euros por unidad
Sensores de temperatura. Saber la temperatura, y poder controlar los distintos aparatos de climatización, permite poner la casa en modo confort antes de llegar a ella. Lo mínimo es algo que os informe de la temperatura y humedad a distancia, como éste sensor de Govee por 30 euros. Si ponéis un termostato capaz de gestionar la climatización de casa, vuestra domótica subirá muchos puntos, pero también suele ser bastante más caro.
Sensores de apertura. Se colocan en el marco de las puertas y ventanas para chivarse si alguien las abre. Lo ideal es poner uno de estos sensores en cada punto de entrada a la casa, pero, como eso puede ser bastante caro, lo básico es la puerta principal y ventanas que queden accesibles desde el exterior; además del garaje, por ejemplo. Este pack de cuatro sensores es perfecto para empezar: cuesta 42 euros.
Todo lo anterior funciona de manera independiente e inalámbrica: cada uno de los dispositivos se conecta a la red WiFi. Si queréis una solución centralizada, necesitáis una centralita, hub o gateway: éstos permiten añadir todos los accesorios domóticos para controlarlos desde un único sitio. Los precios pueden dispararse, también traen consigo un problema: una vez os decantéis por un protocolo de conexión, todos los accesorios domóticos que compréis deben ser compatibles o deberéis cambiar el hub (y seguramente los accesorios adquiridos). En la actualidad, Zigbee y Z-Wave son de los más populares, encontraréis todo tipo de dispositivos domóticos para ellos (yo llevo usando Z-Wave desde hace ocho años). En un futuro próximo, Matter está llamado a ser el estándar de smart home definitivo.
La privacidad es importante: tened en cuenta que los servicios conectados pueden quedarse datos valiosos de vuestra residencia y hábitos de vida. Además, supeditar todas las conexiones al WiFi implica que la seguridad se pierde si se cae la red. O si se utilizan inhibidores de frecuencia, por ejemplo.
¿Lo reconoces?
Este gadget escondido es bastante difícil de averiguar, lo reconozco, pero viene a colación de una noticia consolera muy curiosa que tenéis reflejada más abajo. ¿Sabéis lo que se oculta tras este fragmento de imagen?
La curiosidad de la semana: una cámara para Game Boy del tamaño de un cartucho
Si tuvisteis la suerte de probar la Game Boy Camera original en su momento, seguramente recordéis lo mucho que abultaba el accesorio (aparte de las fotos que hacía, que eso era otra historia). Ahora, el modder Cristopher Graves ha conseguido embutir toda una cámara actual en un cartucho de Game Boy; miniaturizando los componentes para reducir al máximo el conjunto. El resultado pasa por un auténtico cartucho de la mítica consola, con resultados similares en la calidad y estilo de las imágenes. Como curiosidad, Cristopher utilizó la cámara de un iPhone XR.
Gadgetonoticias
Los plegables de Samsung se presentan este julio. Ya tenemos fecha oficial para los Samsung Galaxy Z Flip5 y Samsung Galaxy Z Fold5: se presentarán en Seúl el próximo 26 de julio a las 13:00 horas de España. El streaming estará accesible en el canal de YouTube de Samsung.
Mando de 8BitDo a lo Neo Geo CD. El fabricante de mandos de control se ha hecho fuerte en el universo retro: sus productos unen la compatibilidad con dispositivos actuales al tiempo que se basan en clásicos anteriores de consola. Como su nueva propuesta, un mando clavado al de la mítica Neo Geo CD: compatible con móviles, ordenadores y consolas; incluye Bluetooth y WiFi; tiene 35 horas de autonomía y un precio de 35 dólares en preventa. Se distribuirá en Estados Unidos el próximo 15 de agosto.
Llega el móvil compacto por antonomasia: Asus Zenfone 10. Es una de las sagas que más me gustan de Android, en especial porque su tamaño reducido no le hace perder prestaciones. El nuevo Asus Zenfone 10 incluye un Snapdragon 8 Gen 2, pantalla AMOLED de 5,9 pulgadas con refresco a 144 Hz, doble cámara trasera con sensor principal de 50 megapíxeles, 4.300 mAh con carga rápida de 30 W y carga inalámbrica a 15 W, resiste el polvo y el agua… Lástima que el precio no sea algo más contenido: el más barato cuesta 829 euros. Lo analicé y me gustó mucho.
El Google Pixel 8 Pro aparece en forma de prototipo. Este año Google no anticipó la nueva familia en su Google I/O, se limitó a presentar su móvil accesible para 2023: el Google Pixel 7a. Aun así, casi conocemos todo sobre los Pixel 8, incluso los hemos visto en la realidad: el Google Pixel 8 se dejó ver como prototipo. El móvil muestra un módulo trasero fotográfico con la ya clásica franja, se ve la triple cámara posterior, la pantalla no parece muy curvada, incluye 12 GB de memoria RAM, un procesador Tensor G3 y 128 GB de almacenamiento. Seguramente Google lo presente en otoño.
AMD revitaliza el socket AM4 con el nuevo Ryzen 5 5600X3D. Los dueños de un viejo PC con placa base AM4 tienen en el recién estrenado chipset una manera de actualizar sus ordenadores por no demasiado dinero: AMD vende el Ryzen 5 5600X3D por 229 dólares. 64 MB de caché L3, seis núcleos, 12 hilos y una distribución limitada que AMD sólo realizará a través de Micro Store en Estados Unidos. Se pondrá a la venta el próximo 7 de julio.
Back to the past: Game Boy Printer
El producto escondido de hoy es un gadget muy curioso que se vendió para la Game Boy: una impresora con la que imprimir las fotos hechas con la Game Boy Camera (y de algunos juegos compatibles). Se puso a la venta en 1998, junto con el accesorio de cámara. E imprimía las fotos en blanco y negro sobre un rollo de papel térmico, como el de los tickets de supermercado. Funcionaba con seis pilas AA, necesitaba un cable para conectar la impresora a la consola y el papel era adhesivo.
Muy buenas sugerencias, gracias!