Adiós al “No tenía cobertura”: la generación de teléfonos móviles satelitales que viene
Las comunicaciones satélites en los smartphones, que ya estrenaron Apple y Huawei en sus últimos modelos, están llamadas a convertirse en el próximo argumento para que renovemos el teléfono.
No sé vosotros, pero yo ya tenía ganas de que acabasen por fin las fiestas navideñas. Ahora toca ir cumpliendo la lista de propósitos, eliminar las calorías acumuladas en la medida de lo posible y rellenar la lista de deseos tecnológicos para este 2023 al que apenas acabamos de quitarle el lazo. No pinta mal.
Soy Iván Linares. Comenzamos.
El fin de la falta de cobertura en el punto de mira
Las conexiones telefónicas inalámbricas fueron evolucionando desde su vertiente analógica primigenia a digitales con el estándar GSM; del que fueron surgiendo sucesivas generaciones hasta llegar al 5G. Todo tomando como base la conectividad celular terrestre: los móviles se conectan a las torres de comunicación más cercanas, son ellas las que se encargan de transmitir la voz y datos a los centros de datos de las operadoras.
Los smartphones llevan buscando la máxima velocidad en la conexión desde que se popularizaron. Y han alcanzado un límite más que decente: en torno a 3 Gbps con la banda milimétrica o mmWave, lo máximo a lo que aspira el 5G actual (y que pronto llegará a España, la subasta ya tuvo ganadores). Una vez superados los límites de velocidad, y mientras las operadoras adaptan sus redes a los requerimientos, los fabricantes encontraron un nuevo argumento de venta: cobertura total.
Los teléfonos satelitales no son algo nuevo, llevan en funcionamiento desde finales del Siglo XX. Grandes, pesados, con antenas enormes, muy caros y costosos de mantener. En contraste con los smartphones actuales, un teléfono satelital es un mastodonte muy básico: ofrecer cobertura en cualquier parte del globo implica sacrificios. Por eso sorprende que móviles como los iPhone 14 incluyan cobertura satelital y que fabricantes como Qualcomm aseguren la compatibilidad de sus chipsets con las comunicaciones vía satélite. ¿Significa eso que tendremos el poder de un teléfono satelital en nuestro mucho más reducido smartphone?
No tan rápido: los smartphones no suplantarán a los teléfonos satelitales. Todavía
Los móviles aptos para realizar comunicaciones de voz y de datos vía satélite requieren un conjunto de antenas complejo y de envergadura. Y los smartphones, cargados ya de antenas y con una dificultad enorme para esconderlas sin perder capacidades de recepción, no pueden físicamente encajar el hardware necesario (aún). Por tanto, seremos incapaces de llamar sin cobertura celular: la finalidad de funciones como la de los iPhone 14 es ofrecer una manera in extremis de enviar mensajes de emergencia. En situaciones muy controladas y sólo eso, mensajes. Contados.
Para usar los mensajes satelitales en los iPhone 14 hay que realizar un proceso de preparación que dura varios minutos y que implica esperar a que pase un satélite por encima. Una vez la órbita coincide, hay que mantener el iPhone perpendicular al satélite y esperar a que el mensaje, de unos pocos Kb, termine enviándose; proceso engorroso y que se ve fácilmente interrumpido con sólo mover ligeramente el teléfono (tal cual, puedo dar fe). De aquí a poder llamar desde cualquier parte hay un abismo casi insalvable, incluso a pesar de la miniaturización tecnológica.
No podremos hacer llamadas desde el lugar más apartado que exista, tampoco navegar por Internet como lo hacemos con un smartphone. Y está por ver si podremos usar aplicaciones como WhatsApp: la cobertura satelital en los smartphones de momento se limitará a que pueda salvarnos la vida en casos muy puntuales. Que tampoco es poca cosa, ojo: bienvenida sea esta tecnología.
¿Lo reconoces?
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Los Samsung Galaxy S23 se acercan
La marca coreana ha confirmado la fecha en la que celebrará la presentación de sus móviles más esperados para este año: los Galaxy S23 verán la luz en un Unpacked que se celebrará en San Francisco el próximo 1 de febrero a las 19:00h de España. En principio veremos la nueva generación con los habituales tres modelos: el S23, S23+ y S23 Ultra. Con procesadores Snapdragon 8 Gen 2 para todos, todos los rumores apuntan a que se acabaron los Exynos para la gama premium de Samsung.
Aparte de la fecha confirmada, también se filtraron las maquetas del futuro trío. El Ultra mantiene las formas de las generaciones anteriores, inspirado en la línea Note; con un diseño de esquinas muy redondeadas y cantos rectos para los otros dos. Según Samsung, la nueva generación dará un salto adelante en fotografía.
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Gafas de realidad virtual HTC Vive XR Elite
La realidad virtual doméstica tiene un nuevo competidor: HTC desveló en el marco del CES sus Vive XR Elite, rivales de las Meta Quest Pro. Con un precio más económico que su adversario (1 099 dólares de HTC en preventa frente a los 1 499 dólares de Meta), las nuevas Vive incluyen también un casco independiente y dos controladores.
Registro de movimiento integrado con su conjunto de cuatro cámaras y sensores (y una cámara principal de 16 megapíxeles), resolución de 1 920 x 1 920 píxeles para cada ojo (3 840 x 1 920 combinada), procesador Snapdragon XR 2, 128 GB de almacenamiento con 12 GB de memoria RAM, batería para unas dos horas de juego y un peso para el casco de 625 gramos. Sobre el papel, las HTC Vive XR Elite parecen la mejor opción para quienes busquen unas gafas VR de alto nivel. Por las primeras pruebas, las sensaciones son positivas.
La curiosidad de la semana: el micro para el metaverso que parece un bozal
El Mutalk de Shiftall parece una broma, pero es real: tras su dudoso aspecto se esconde un micrófono Bluetooth que no sólo atenúa el ruido para que no se cuele en la sesión, también reduce el volumen de la voz para que hablarle a los monigotes virtuales no moleste a las personas físicas que estén alrededor. Atenúa hasta 30 dB el habla, aguanta más de ocho horas con una recarga y puede utilizarse sin manos gracias a la banda que rodea la cabeza. Llegará a Estados Unidos en verano de 2023 a un precio que rondará los 200 dólares.
Gadgetonoticias
Microsoft habría cancelado la Surface Duo 3. Con dos móviles Android de doble pantalla en su haber, una filtración asegura que no habrá una tercera generación. En su lugar, Windows Central, fuente de la noticia, asegura que Microsoft encamina sus esfuerzos a desarrollar un verdadero móvil plegable: de una pantalla, similar a los Samsung Galaxy Fold. Dicho desarrollo aún no tiene fecha de anuncio.
Apple vulnera una patente con sus Watch. Según una sentencia de la Comisión de Comercio estadounidense, los Apple Watch con registro de SpO2 infringen una patente registrada por Masimo, un fabricante de oxímetros. Ahora, la Comisión valorará si bloquea las ventas de los Apple Watch que incluyen el sensor de oxígeno, sería un duro golpe para la marca. Apple está en desacuerdo con la decisión y buscará una revisión completa del caso.
Apple habría cancelado el desarrollo del iPhone SE de cuarta generación. Otra mininoticia manzanera, esta vez en relación con su generación más barata de teléfonos: Ming Chi-Kuo, un conocido «filtrador», anticipa que los futuros iPhone SE, que deberían de presentarse en 2024, no saldrán a la luz. Una de las razones sería el desarrollo de un chipset 5G propio de Apple para sus dispositivos. En la actualidad, la empresa monta módems de Qualcomm.
El dron vigilante de Ring no llegará, como mínimo, hasta 2024. Tener a un policía con cámara volando por casa fue la propuesta más arriesgada de Ring: el Always Home Cam es un dispositivo que actualmente se encuentra en modo de prueba y sólo accesible por invitación (lleva así desde su presentación en 2021). Ahora, la marca confirmó a The Verge que no distribuirá comercialmente el dron hasta 2024 como mínimo: Ring está peleando con la fabricación en masa y con la reducción de costes del dispositivo. Según Jamie Siminoff, fundador de Ring, el Always Home Cam es un dispositivo de 2 000 dólares que se venderá a un coste más accesible de 249,99 dólares.
Back to the past: Google Glass
Creo que es el gadget más reciente que he traído a esta sección: Google presentó el Glass Project en 2012; para después comercializar sus Google Glass en 2013. Muy limitadas, y con un aire tan futurista que aún hoy nadie las llevaría por la calle, aquel gadget supuso un impulso enorme para la denominada como «realidad aumentada», ese espacio mixto donde se proyectan elementos digitales sobre la visión real del sujeto (como usar el móvil para buscar Pokémon en Pokémon Go, por ejemplo).
Las Google Glass fueron desde el inicio un producto exclusivo y muy limitado, apenas había existencias. Con un coste inicial de 1.500 dólares, las Explorer Edition originales se conectaban al smartphone para proyectar sus indicaciones en la diminuta pantalla integrada. Con cámara incorporada para grabar y hacer fotos, las Glass no terminaron de encontrar su sitio en el terreno particular. Todo lo contrario del profesional: Google mantiene el desarrollo de sus gafas de realidad aumentada para el uso empresarial. Actualmente, el modelo disponible es el Enterprise Edition 2.